La República Islámica de Pakistán o Pakistán/Paquistán (پاکستان en Urdu) es una nación ubicada en el centro-sur de Asia. Limita con India, Irán, Afganistán, China y el mar Arábigo. Pakistán, uno de los estados más poblados del planeta, tiene más de 165 millones de habitantes, la mayoría de los cuales son musulmanes, siendo el Islam la religión mayoritaria.
Choudhary Rahmat Ali, fundador del Movimiento Nacional Pakistani ideó la palabra Pakistán en 1933 como un acrónimo para las cinco provincias musulmanas del norte de la India: Punjab, Provincia del Noroeste (Afgana), Cachemira (Kashmir en inglés), Sind y Baluchistan. Pakistán es también una palabra en Urdu que siginifica tierra de los sagrados o puros. La líder opositora de Pakistán Benazir Bhutto, asesinada el jueves en un atentado suicida en Rawalpindi, conocía bien los riesgos que corría cuando decidió emprender una campaña pública por la restauración de la democracia en su país.
Horas después de regresar a su hogar en octubre, tras ocho años de exilio voluntario, un atacante suicida asesinó a más de 150 personas al atentar contra la caravana que le daba la bienvenida en las calles de Karachi.
Luego del ataque, se produjeron amenazas de militantes ligados a Al Qaeda, enojados por el apoyo de Bhutto a la guerra de Washington contra el terrorismo.
"Podrían intentar asesinarme," advirtió Bhutto al diario panárabe Asharq al-Awsat en una entrevista antes de volver a Pakistán. "He preparado a mi familia y a mis seres queridos para cualquier posibilidad," agregó.
A pesar de haber estado en el desierto la mayor parte de la última década, Bhutto, de 54 años, seguía siendo una de las políticas mujeres más reconocidas en el mundo.
En 1986, un vasto número de seguidores dio la bienvenida a Bhutto cuando regresó al país para desafiar al dictador que había ejecutado a su padre, Zulfikar Ali Bhutto, siete años antes.
Bhutto fue la primera mujer primera ministra en el mundo musulmán cuando fue elegida en 1988 a los 35 años. Fue depuesta en 1990, reelecta en 1993 y derrocada nuevamente en 1996 en medio de acusaciones de corrupción y mala administración.
La líder se defendió con el argumento de que las acusaciones tenían motivos políticos, pero en 1999 eligió permanecer en el exilio en vez de enfrentarlas.
Luego de vivir ocho años en el exterior, Bhutto volvió en octubre pasado para liderar a su Partido del Pueblo de Pakistán en las elecciones nacionales. Esta vez, sin embargo, en vez de confrontar al dictador, deseaba trabajar con el jefe del Ejército y presidente Pervez Musharraf por una transición pacífica hacia un Gobierno civil.
Aliados occidentales consideraron su cooperación como la mejor manera de sostener los esfuerzos en contra del terrorismo en el país nuclear.
Pero luego de que Musharraf impusiera un estado de emergencia a principios de noviembre, Bhutto protestó efusivamente y redobló sus pedidos para que el presidente renunciara al Ejército y convocara a elecciones libres.
Incluso cuando, bajo presión internacional, Musharraf renunció al Ejército a fines de noviembre, Bhutto y su rival político Nawaz Sharif siguieron manteniéndolo a distancia y advirtieron sobre intentos de fraude en las elecciones.
FAMILIA MARCADA POR LA VIOLENCIA
La familia de Bhutto no es ajena a la violencia.
Sus dos hermanos murieron en circunstancias misteriosas y ella dijo que militantes de Al Qaeda trataron de matarla varias veces en la década de 1990. Reportes de inteligencia han señalado que Al Qaeda, los talibanes y grupos de la jihad pakistaní habían enviado suicidas para atacarla.
Bhutto había dicho que si llegaba al poder, le permitiría a las fuerzas de Estados Unidos perseguir a Al Qaeda en territorio pakistaní si las propias fuerzas de Pakistán no eran capaces de realizarlo por su cuenta.
La líder pakistaní, cuyo primer nombre significa "único," nació en 1953 en el seno de una familia terrateniente adinerada. Ella era la primera de cuatro hijos y fue educada en una escuela de la misión cristiana en Karachi, además de haber estudiado en Harvard y Oxford.
Hija del primer líder elegido popularmente en Pakistán, su misión comenzó en 1977 cuando el jefe del Ejército Mohammad Zia-ul-Haq derrocó a su padre. Veintiún meses después se convirtió en un feudo sangriento cuando su padre, Zulfikar Ali Bhutto, fue ejecutado en la horca después de un controvertido juicio.
Durante años, Bhutto luchó sin éxito contra Zia-ul-Haq. Ella y su madre, Nusrat, entraban y salían de prisión hasta que en 1984 le permitieron viajar al extranjero para recibir tratamiento médico.
En agosto de 1988, Zia-ul-Haq murió en un accidente aéreo. La victoria electoral de Bhutto más tarde ese año fue aplaudida por el mundo entero como la llegada de la democracia a Pakistán.
Pero muchas personas en los poderosos servicios de seguridad desconfiaron de ella y el entonces presidente Ghulam Ishaq Khan la echó después de 20 meses, acusándola de corrupción.
Bhutto acusó al Gobierno de Ghulam Ishaq Khan de cometer fraude en las elecciones tres meses después para llevar a su protegido, Nawaz Sharif, al poder.
La líder opositora pakistaní logró volver en 1993, pero fue nuevamente derrocada por acusaciones de corrupción y mala gestión.
Asif Ali Zardari, el empresario con el que se casó en un matrimonio arreglado en 1987, fue visto como su mayor debilidad. Zardari fue liberado bajo fianza en el 2004 después de ocho años en prisión. La ordenanza del 5 de octubre también eliminó los cargos en su contra.